El Sol brillaba radiante sobre el Hotel Rural El Cortijo San Ignacio

Todo se iba desarrollando según lo previsto y nosotros podíamos empezar a darle nuestro toque a las mesas con la mantelería elegida por los novios. Las barras comenzaban a coger forma y el Mojito estaba en su punto…
En la cocina, el Cóctel se preparaba con delicadeza. Maître, chefs, camareros… todo el personal organizado y coordinado a la perfección. Rincones especiales como nuestro Rincón del Jamón estaba colocado y listo para cargarse de la mejor selección de jamones de B de Bellota.

El Rincón Dulce lo colocamos sobre unas bovinas de madera para que todo estuviera en sintonía. Galletitas, nubes, cake pops… cada uno colocado con conciencia. Y si te parece bonito… más buenos estaban aún!

Pero, sin duda, el rincón que más protagonismo tuvo fue el Rincón del Gin Tonic. Una selección de los mejores Gin Tonic estuvo presente durante toda la noche. Distintas marcas, y tónicas para los distintos paladares, cada uno con su correspondiente perfect served. Cada combinado salió con un Color, Sabor y Aroma únicos…

Y en punto y final a una atmósfera ideal lo puso The Federicas con su impecable gusto

Velas para la piscina, las escaleras, pizarras y maderas para guiar a los invitados hacia en uno de los días más importantes para la vida de J&G. Todo fue elegido y colocado al mínimo detalle, desde el menú hasta las cholitas que regalaron los novios a las invitadas para que estuvieran cómodas y disfrutaran toda la noche.

Fue un día especial, una noche especial, una boda ideal. Nos encanta lo que hacemos.
¡Vivan los novios!